Ni en el más atrevido de los sueños de aquel muchacho que correteaba por las calles del barrio jugando a lo que se terciase, hubiera imaginado que un día llegaría a ser Presidente de Gaztelubide, santo y seña del donostiarrismo, y que para nosotros representaba el sitio donde calmábamos nuestra sed con interminables vasos de agua que nos servían aquellos socios.
Pasados unos cuantos años y habiendo heredado la plaza de socio de mi difunto padre, el entonces presidente José Antonio Salas en el año 1.995, me dio la oportunidad de ingresar en su Junta Directiva, en calidad de tesorero, para posteriormente, en el año 2.011, la Asamblea de socios quiso que ocupara la presidencia de Gaztelubide.
Desde esta posición quiero agradecer a todos los que han formado o forman parte de la masa social de Gaztelubide, su contribución a que nuestra Sociedad, conserve el espíritu que en aquel lejano 1.934, los fundadores supieron darle vida y asegurar una continuidad que esperemos dure muchos años.
Por otra parte, quiero abrir las puertas de Gaztelubide a todos y todas las donostiarras y en especial a las personas que formamos el colectivo de “Sociedades Populares” que con nuestra participación y dedicación conservamos y actualizamos el legado recibido de nuestros mayores.
Asimismo las puertas de nuestra sede están abiertas continuamente a las Sociedades Hermanadas que con los encuentros que celebramos a lo largo del año, renovamos los lazos de amistad y estrechamos la cercanía que nos une.
No quisiera olvidarme de las “Euskal Etxea” de todo el mundo, y nuestra puerta también está abierta para ellos como no podía ser de otra manera. Cada 19 de enero, a las 24 h, cuando en Donostia empieza a sonar la Marcha de Sarriegi, y el Tambor Mayor levanta el bastón que da inicio a la Tamborrada, sentimos la cercanía de todos.
Ya sabeis donde estamos y os esperamos a todos y todas, con la más calurosa de las bienvenidas.
GORA GAZTELUBIDE
GORA DONOSTIA
Joserra Mendizábal
Presidente de Gaztelubide